Translate

Mostrando entradas con la etiqueta Hacer una petición especial. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Hacer una petición especial. Mostrar todas las entradas

viernes, 6 de enero de 2023

Oración contra la envidia

 



Protégeme, Señor de los proyectos de los envidiosos
cúbreme con tu preciosa sangre salvadora, 
rodéame con la gloria de tu resurrección.
Cuídame por la intersección de María, 
de todos tus santos, de todos tus ángeles.
Haz un cerco divino a mi alrededor, 
para que el rencor de los envidiosos
no pueda penetrar en mi vida.

Dios mío mira a los que quieren dañarme 
o desprestigiarme porque me tienen envidia.
Muestrales la fealdad de la envidia.
Sana sus corazones de la envidia, 
cura sus heridas más profundas, 
y bendícelos para que sean felices, 
y ya no necesiten envidiarme.
Confío en ti Señor.

Señor, 
tú me conoces y sabes que no soy perfecto, 
que hay muchas cosas que todavía puedo cambiar.
Hay mucho que pulir y mejorar 
en mi manera de ser y de actuar.

A veces, no quiero reconocer mis defectos, 
y me lo oculto a mí mismo; y esos defectos me traen muchas 
dificultades,  porque despiertan el rencor de los demás,
la envidia, el desprecio.  

Ayúdame a descubrir mis actitudes de orgullo, 
indiferencia o desprecio, mis egoísmos y comodidades;
ayúdame a ver todo eso que cae mal a los ojos de los demás.

Y dame tu ayuda divina para que pueda cambiar.
Porque si mis actitudes son más agradables y sinceras, 
las envidias de los demás se disiparán como el vapor.

Tócame con tu gracia, y embelléceme con virtudes y 
dones que me hagan más agradable a los ojos de los 
hermanos.

Señor Jesús, muchas veces te he contemplado crucificado 
y me he compadecido de tu dolor.

Muchas veces te he ofrecido pequeños sacrificios 
como una respuesta de amor a lo que hiciste por mí en la cruz.

Muchas veces quise abrazarme a ti,
 uniendo mis dolores a los tuyos.
Pero hoy me pides que aceptes algunas humillaciones
que sufro; me pides que entregue mi orgullo herido,
y que acepte algunos de los sufrimientos
que me causan los envidiosos.
Porqué también tú pasaste por esas angustias.

No quiero pretender ser más que tú, Jesús, 
y acepto tener que sufrir un poco a 
causa de la envidia ajena.
Te lo ofrezco con todo mi cariño, 
para que mi corazón no se obsesione ni se atormente.

Señor Jesús, que perdonaste a los que te envidiaban,
te lastimaban y te crucificaban,
solo tú puedes regalarme la gracia del perdón liberador.

Coloca en mi corazón el deseo sincero de comprender
y perdonar a los que me envidiaban, 
para que pueda mirarlos con tus ojos de amor y compasión.

Dios mío, lleno de gloria, rico en maravillas,
repleto de bondad y de belleza, 
quiero alabarte con todo mi ser.

Tú mereces que yo me postré ante ti
y te adoré con alegría y paz.

Nada en esta tierra tiene derecho a dominar mi corazón,
y a refrenar mi alabanza.
Porque si dejo de alabarte toda mi vida se debilita.

Quiero alabarte, Señor y sé que así seré fuerte
para que los envidiosos no puedan dominarme.

Pero también te adoro por ellos, 
porque son tus criaturas amadas
y por qué en ellos también
 hay reflejos de tu hermosura.

Señor, tú quieres que yo sea un instrumento
 tuyo para bendecir a los demás, 
y cuando yo los bendigo, 
tú derramas tu bondad en sus vidas.

Quiero bendecir a los que me envidian y persiguen, 
quiero desearles que les vaya bien y 
que sean felices; que te conozcan,
te amen, y aprendan a vivir tu Palabra;
que sean santos y buenos.

Yo los bendigo, Señor, 
con los mejores deseos de mi corazón, 
porque así, tarde o temprano, 
dejarán de desear mi mal.

Señor, ya no quiero que el miedo a los 
envidiosos me obsesione  y me quite la calma.

Yo soy amado por ti y tengo la dignidad de ser tu hijo.

Quiero vivir libre y sereno.

Reconozco que el orgullo me hace doler el alma
cuando los envidiosos me critican.

Pero quiero vencer ese orgullo y conocer
la libertad de un corazón simple y humilde.

Hoy levanto la cabeza, Señor y decido caminar erguido,
seguro, con   dignidad, como hijo tuyo amado, 
cómo tú quieres que camine.

Señor mío, Dios adorado, tú sabes cómo el corazón
se me llena de temor, de tristeza y de dolor
cuando descubro que me tienen envidia.

Pero yo me encomiendo a ti, mi Dios, 
que eres infinitamente 
más poderoso que cualquier ser humano.

Quiero que estén en tus manos todas mis cosas,
mis obras, mi vida, mis seres queridos.

Todo te lo confío mi Dios, para que los envidiosos
no puedan causarme ningún daño.

Y toca mi corazón con tu gracia para que 
conozca tu paz, para que de verdad confíe en ti
con toda mi alma. 

Amén.





sábado, 19 de noviembre de 2022

SÚPLICA EN EL CANSANCIO

 

Madre, vengo del tumulto de la vida.
El cansancio me invade todo el cuerpo y sobre todo el alma.
Es tan difícil aceptar con paz todo lo que sucede alrededor 
de uno durante una jornada de trabajo y lucha....
Las cosas en las que habíamos depositado tanta ilusión, decepcionan.
Las personas a las que queremos entregar bondad, nos rechazan.
Y aquellas otras a las que acudimos en una necesidad, intentan sacar provecho.
Por eso vengo a Ti, oh Madre, porque dentro de mí camina un niño inseguro.
Pero junto a Ti me siento fuerte y confiado.  
Sólo el pensar que tengo una madre como Tú (la Santa Virgen María), 
me da ánimo.  Me siento apoyado en tu brazo y guiado por tu mano.
De esta manera puedo, con tranquilidad, retomar el camino.
Renuévame por completo para que consiga ver lo hermosa de la vida.
Levántame para que pueda caminar sin miedo. 
Dame tu mano para que acierte siempre con mi camino.
Dame tu bendición, para que mi presencia sea, en medio del mundo,
un signo de tu bendición.
Amén.




jueves, 3 de noviembre de 2022

Oración para antes de pagar los impuestos (Income Tax)

 



Señor yo, el jefe de esta familia, 
enviare un cheque mañana a nuestro gobierno.
Que todos aquí entendamos que estamos 
contribuyendo al bienestar de nuestro país grande y del mundo.
Jamás vayamos a quejarnos o a ser egoísta en este asunto
de pagar impuestos justos.  Guía Señor, a nuestros representantes
en el gobierno para que  hagan bien uso de nuestro dinero
y que cumplan con nuestros deseo de otros pueblos también 
disfruten de la abundancia de las cosas buenas con que tú 
has dotado nuestro país.
Amén.

sábado, 29 de octubre de 2022

Oración de una niña pensando hacerse monja

 


Madre Queridísima.  
Madre mía, acudo a ti hoy
 con la mente y el corazón llenos de necesidad.
Dime María, ¿qué desesa Dios de mi?
Una vez tu te llamaste la esclava del Señor y 
El hizo saber Su voluntad.
Yo también hoy me llamó esclava del Señor.
¿Le pedirás entonces, que me haga también saber su voluntad?
¿Estará pidiendo de verdad que sea Su novia y ayude a esparcir
Su reino en el mundo?
Si es así, entonces quiero obedecerle. 
Por favor. Madre querida, pídele me quite de la mente
mis dudas y vacilación para que yo pueda andar por el camino
que me señala.  Sé bien que si tengo la gracia de una vocación
especial, me costará cara: pero estoy dispuesta a hacer 
todo lo que tengo   que hacer  para pagar el precio.
Bien sea que está exigiendo la renuncia de muchas cosas
apreciadas por una mujer, pero sé que me premiará con un céntuplo.
El será mío, tendré la casa de Dios como mía propia.
Tendré muchos hijitos espirituale: aquellos por los cuales rezaré y por 
los cuales gastaré mi vida.  Por el momento, Madre,
pido una sola cosa-el conocer la voluntad de El,
el querer aceptarla y entonces
las fuerzas para vivir como un que se haya entregado-cuerpo y alma, 
corazón y mente- a  su Señor Dios, a Jesús, el Hijo tuyo. 
Amén.




Oración para acabar con la aversión por otro

 



Señor me doy cuenta de que esta aversión es insensata.
Después de todo, tú quieres mucho a esta persona y yo, 
ciego y estúpido, no veo el bien en ella que tú ves.
Ayúdame a acabar con mi aversión.
Si por acaso sigo sintiendo esta aversión debido a cierto 
¨bloque¨ emocional, ayúdame a ser especialmente
bueno para con esta persona.
Amén.

Oración por la paz

 



Danos la paz en nuestros días, Señor,
porque no hay quien luche por nosotros, 
sino tú, Dios nuestro.

Oración para acabar con el Resentimiento

 


Señor, ayúdame a perdonar y olvidar.

Déjame ver que el resentimiento de las injurias

verdaderas o imaginadas me envenena el alma.

Sé de mi propia experiencia que, al sentirme

injuriado o tratado injustamente, 

por el momento no estoy muy afectado, 

pero más tarde, cuando me acuerdo de la injuria,

me pongo irritado y resentido y tentado a vengarme.

Ayúdame, buen Jesús, a no seguir pensando en las

injurias del pasado.  Ayúdame a olvidarme de ellas

y a pasar a otra cosa más provechosa para mi alma.

Amén.

viernes, 28 de octubre de 2022

Oración a San Gerardo para una Señora que desea tener hijos

 


Oh buen San Gerardo, 
intercesor poderoso delante de Dios
y hacedor de maravillas,
te invoco y pido me ayudes.
En tu vida siempre tratabas de hacer
la voluntad divina: ayúdame a mi 
también hacerla.  
Pide al Señor de la vida,
de quién procede toda paternidad,
que yo tenga hijos.
Quiero criarlos bien para que sirvan a Dios
en esta vida y herederos el reino 
de Su gloria en la vida venidera.
Amén.




lunes, 17 de octubre de 2022

Oración por los que padecen Hambre

 


Señor Jesucristo, 
Tú nos exhortaste a darte de comer
cuando padeces hambre,
que vemos en las caras emaciadas 
de otros seres humanos.
Déjame comprender que hay millones
de personas-hijos del mismo Dios,
hermanos y hermanas nuestros
-que mueren de hambre sin merecerlo.
No permitas que sea indiferente 
al clamor de los necesitados,
ni que tranquilice mi conciencia 
pensando que nada puedo hacer para 
remediar este mal.  
Ayúdame a hacer algo
-no importa cuán poco sea-
para aliviar esta necesidad que llega al corazón.
Ayúdame también a orar regularmente para que 
todos los que padecen hambre se vean recompensados
por este terrible sufrimiento que padecen y 
reciban alivio tan pronto como sea posible.
Amén.

viernes, 19 de agosto de 2022

Restauración de la Autoimagen y el Desarrollo de la Autoestima

 


Padre amado, vengo a tu presencia y en Nombre de tu Hijo Jesucristo, 

clamo a ti, a fin de que tanto a mí, como a las personas por quienes quiero interceder, 

nos conceda la gracia de vernos como tú quieres que nos veamos

y nos amemos a nosotros mismos según la medida de tu Divino Corazón.

Tócanos, Señor y sánanos.

Te pido que, así como Tu Divino Hijo Jesucristo tocó al hombre enfermo de lepra

y lo curó, también lo envíes a nuestras vidas, a fin de que, con su bendita mano,

nos toque tanto a mí, como a las personas que lo necesitan, 

sanándonos y restaurándonos en estas áreas de la autoimagen

y de la autoestima, y en aquellas  otras áreas en que tú veas que se necesario trabajar.

Tócanos, Señor y sánanos.

Toca a quienes se sienten feos, tímidos, torpes y que piensan que no pueden hacer nada bien.

Sana la memoria de los sucesos o palabras que produjeron esos sentimientos,

Tócanos, Señor y sánanos.

Toca esas áreas donde hay sentimientos indignidad, de inferioridad o de inadaptabilidad,

líberándonos de esos sentimientos autodestructivos y poniendo, en cambio,

las nuevas actitudes de sentir la propia dignidad y valor y de la capacidad

de adaptarse en cada lugar. 

Tócanos, Señor y sánanos.

Quizás hay heridas producidas en nuestro interior por apodos puestos en la infancia, 

en la adolescencia o en la vida adulta, o por otras palabras ofensivas.

Tócanos, Señor y sánanos.

Tócanos con tus benditas manos y ayúdanos a querernos más, a aceptar tú perdón

y a perdonarnos a nosotros mismos y a los demás.

Tócanos, Señor y sánanos.

Quizás hay quienes no se sienten dignos de recibir amor; y la duda y la inseguridad

han echado raíces profundas en su ser.  Quita, Señor, esos sentimientos de timidez,

vergüenza, desengaño, culpabilidad, fracaso, retraimiento, desilusión y culpabilidad.

Tócanos, Señor y sánanos.

Te pedimos especialmente que nos liberes,

 si son comportamientos heredados o recibidos desde el vientre materno.

Tócanos, Señor y sánanos.

Libéranos de toda fuerza negativa que nos ha tenido trabados y encadenados

en una falsa autoimagen y en una quebrantada autoestima,

haciendo que no podamos vivir la vida victoriosa 

y abundante que tú Jesús, nos quieres dar.  

Tócanos, Señor y sánanos.

Amado Jesús, que has muerto por amor a nosotros en la cruz

y nos has dejado a María como madre, te pedimos que, 

con tu Preciosa Sangre, laves las profundas heridas emocionales

y recuerdos dolorosos subterráneos que nos roban la autoestima.

Tócanos, Señor y sánanos.

Ayúdanos a abrirnos al soplo de tu Santo Espíritu,

 para que, así, podamos experimentar cuánto nos amas, 

mientras que, con la ayuda de los sacramentos, 

irás llenando todos los vacíos de la vida, poniendo en nuestro interior

un sereno y santo valor, confianza y convicción.

Tócanos, Señor y sánanos.

Guíanos par que cada uno de nosotros pueda llegar 

a ser la persona que tú quieres que seamos

y cumplir tu voluntad haciendo todo aquello que nos pides 

y nos pedirás, para trabajar con alegría 

y constancia en la construcción de tu Reino. 

Amén.

Tócanos, Señor y sánanos.

domingo, 14 de agosto de 2022

Madre Tres Veces Admirable de Schoenstatt

 



Dios te salve María Madre de Dios.
Madre Reina y Victoriosa

Estoy en tu mirada, enfermo, 
con mucho miedo que no me animo a reconocer.


Ayuda Madre Admirable.   

Que comprenda y sienta que no estoy solo, 
que estás tu a mi lado como mi Madre.


Ayuda Madre Admirable.  

Que abra mi corazón y deposite con confianza
 todos mis sufrimientos miedos y miserias en el tuyo.


Ayuda Madre Admirable.  

Tú que siempre me has amado y conocer el dolor, 
dame fuerzas como mi Hermano Jesús, 
en el camino del calvario.

Querida Madre Tres Veces Admirable.

Recibe mis amargos sufrimientos en el Santuario,

 donde por amor, son transformados en gracia 

que Tú derramas para gloria de la Santísima Trinidad.

Cobijados y aliviados en tus brazos,

 transformado por tu amor, pueda, Madre, 

servir como apóstol y participar con Cristo

 en la salvación de las almas.

Por Amor a Ti, Dios Padre Misericordioso.

Y así, cuando llegue la tarde 

en que sonriendo vengas a buscarme, 

cante para siempre junto a Tí: 

¡ Mi alma glorifica al Señor. 

Y mi espíritu se alegra en Dios mi Salvador!

Porque puso sus ojos en la pequeñez de su esclava!

¡ Santo es su nombre! 

Y su misericordia se derrama de generación en generación.

En tu poder y tu bondad fundo mi vida;

en ellos espero confiado como niño.

Madre Admirable, en ti y en tu Hijo en toda circunstancia

creo y confío ciegamente.

Amén.

Lávame, Señor y quedará más blanco que la nieve.

Señor, sudaste Sangre en el Huerto de los Olivos

y aceptaste la cruz tan pesada, 

llena de pecados y dolores para salvarme.

Hoy tengo que aceptar la cruz de una operación

y los dolores que sufriré.

Jesús, Dios mío, haz que estos dolores aceptados con amor

puedan salvar las almas, las que Tú quieres que por mí sean salvadas.

Gracias Señor.

Consagración

Oh, Señora, mía, oh Madre mía.

Yo me ofrezco todo a Tí, 

y en prueba de mi filial afecto

te consagro en este día:

mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón, 

en una palabra, todo mi ser.

Ya que soy todo tuyo, oh Madre de bondad

guárdame, defiéndeme, utilízame,

como instrumento y posesión tuya.

Amén.


Desde 1914 Schoenstatt es un lugar de gracias mariano.  La Santísima Virgen quiere atraer a los hombres al Santuario y formarlos como miembros vivos de la iglesia de hoy.


viernes, 5 de agosto de 2022

Al BRAZO PODEROSO DE CRISTO

 



Brazo Poderoso aquí vengo con la fe de mi alma cristiana a buscar consuelo en situación tan difícil para mí.  No me desampares y las puertas que quieras abrir en mi camino sea tu Brazo Poderoso el que las abra o las cierre para resolver mi tranquilidad que tanto ansío.  Aquí ante tu imagen a tus plantas dejo la necesidad de mi súplica; la que hace un corazón afligido por el destino, que se siente vencido ya a toda lucha y no puede combatir si tu Brazo Poderoso no la detiene, sucumbirá por falta de fuerza de la razón humana.  Brazo poderoso, asísteme, apárame y condúceme a la Patria Celestial. Amén.

miércoles, 3 de agosto de 2022

Oración por las necesidades presentes

 


Señor, yo no oro por las necesidades del mañana;
por hoy solamente, Dios mío, guárdame de toda mancha de pecado.
Permíteme tanto trabajar como orar diligentemente;
ser amable de palabra y obra, sólo por hoy;
Hazme lento hacer mi voluntad, mas presto a obedecer;
ayúdame a mortificar mi carne, sólo por hoy.
No permitas que yerre o hable sin pensar;
pon un sello en mis labios, sólo por hoy.
Permíteme ser alegre, cuando es debido, Señor, y grave, cuando es necesario;
permíteme ser fiel a Tu gracia, sólo por hoy.
Y si la marea de mi vida recediera hoy, dame Tus divinos Sacramentos, 
dulce Señor, en el día de hoy.
Por la mañana y sus necesidades, no oro; tan sólo, Señor, 
protégeme guíame y ámame, por el día de hoy.

martes, 26 de julio de 2022

Santa Ana pidiendo un buen esposo

 



Altísimo Dios eterno, de quien depende todo el ser y el reparo del linaje humano: postrada en tu real presencia suplico se digne tu infinita bondad de mirar las ansias de mi alma y oir mis peticiones.

Ante tus ojos son manifiestos mis deseos de que, en el estado de matrimonio, me des la compañía de un esposo que me ayude a guardar la divina ley y testamento santo, para crecer ambos en perfección y en la observancia de tus preceptos.

Santo Dios, Padre Infinitamente Providente, no escondas tu piedad de mí, ni permitas, pues eres Padre, que mi súplica sea desechada.

Y pues me mandas, Señor mío, que con confianza te pida como a poderoso y rico en misericordia, concédeme lo que por ti deseo y pido, pues en pedirte hago tu Santa Voluntad y obediencia.

Y si mis culpas detienen tus misericordias, aparta de mí lo que te desagrada e impide.

Poderoso eres, Señor, Dios de Israel, y todo lo que fuere tu Voluntad puedes obrar sin resistencia.

Lleguen a tus oídos mis peticiones; que soy pobre y pequeña, tú eres Infinito e inclinado a usar la misericordia con los abatidos.

¿A dónde iré fuera de ti, que eres Señor de los señores y Todopoderoso?

Tú me enseñaste a desear y a esperar de tu liberalidad.

Entregado tengo mi corazón y mente a tu Voluntad.

Aparta mis ojos de la vanidad.

Si fuera tu beneplácito conceder mi petición, todo lo pondré a tu entero servicio, Padre mío, para ayudar a propagar el Reino de Dios en la tierra.

Haz de mi lo que sea de tu agrado y alegra, Señor, mi espíritu con el cumplimiento de esta esperanza.

Mira desde tu solio al humilde polvo y levántalo, para que te magnifique y adore y en todo se cumpla tu Voluntad y no la mía.  Amén.


Esta oración fue escrita en el siglo XVII por la mística española venerable María de Jesús de Ágreda luego de una visión de la Virgen María, quien le habría dicho que así rezaba su Madre Santa Ana a Dios pidiendo un buen esposo.


sábado, 25 de junio de 2022

Momentos en depresión

 Foto histórica de la Gran Depresión a Nivel Mundial.
Es un mal continuo y latente efecto de la opresión de un gobierno,
 la impotencia de no tener los recursos para una vida digna, 
la soledad y la incomprensión de una pareja y pensar que su problema no tiene solución.
Es la perdida de la esperanza, pensar que Dios se ha olvidado de nosotros.


Dios mío, Dios  mío ¿Por qué me has abandonado?
De improvisto, cincuenta atmósferas han caído
 pesadamente sobre mí y no sé a donde huir, ni tengo ganas de vivir. 
¿Donde estás, Señor? 
Arrastrado como un desvalido hacia un erial inerte, 
sólo sombras rodean
mi fronteras. ¿A dónde salir? 
Piedad, Dios mío.
¡Pobre ángel sin alas! abandonados 
sobre caminos olvidados y cubiertos de niebla.
¿Dónde estoy? Estoy en el fondo del mar y no 
puedo respirar. ¿Dónde se escondió la luz?
¿Arde todavía el sol?
Peor que el vacío y la nada, ¿que es esto?,
simplemente horror de sentirse hombre.
Dios mío ¿Porqué no me borras de la lista de los vivientes?
Como una ciudad sitiada, me cercan y aprietan 
y ahogan la angustia, la tristeza, el amargor y la agonía.
¿Cómo se llama esto? ¿Náusea?
¿Tedio de la vida?
La desolación extiende sus grises
 alas de horizonte a horizonte.
¿Dónde esta la puerta de salida?
Pero ¿hay salida? 
Tú eres, sólo Tú eres mi salida, Dios mío.
No me olvido, Jesús, Hijo de Dios
 y Siervo del Padre que allá en Getsemaní,
bajo el clamor de los olivos y a la luz de la luna,
el tedio y la agonía te estrujaron hasta verter
lágrimas y sangre;
y recuerdo que una pesada tristeza de muerte 
te inundó tu interior como un mar amargo. 
Pero todo pasó.
Yo sé que también mi noche pasará.
Sé que rasgarás estas tinieblas, Dios mío,
y mañana amanecerá la consolación.
Caerá las gruesas murallas y de nuevo podré respirar.
Mañana mismo mi pobre alma será visitada y volveré a vivir.
Y diré: gracias, mi Dios, porque todo fue una pesadilla;
solo la pesadilla de una noche que ya pasó.
Mientras tanto, dame paciencia y esperanza.
Y hágase tu voluntad, Dios mío. Amén.

miércoles, 8 de junio de 2022

Oración contra los miedos

 



Señor, mira a tu hijo que te suplica.
Spy obra de tus manos, no me abandones, fortaleza mía.
Tu eres como un escudo protector.
Rodéame con tu poder, como un cerco
 donde ningún mal pueda pasar.

No permitas que algún violento me haga daño,
no dejes que algún espíritu 
dominante quiera adueñarse  de mi vida.  
Porque yo te acepto como único Señor de mi 
existencia, mi vida es tuya.

Nadie podrá dañarme, porque toda mi confianza 
está depositada en ti, mi Creador y Redentor.

Mi Dios amado, yo sé que eres tú más grande
y más bello que todos mis sentimientos y emociones.
que no te puedo abarcar con mi sensibilidad herida.
Tú no eres cómo yo te siento a veces, 
porque eres incapaz de hacerme daño, Dios infinito.
A menudo, experimento mi pequeñez ante tanta grandeza, 
y escapo de ti, como si fueras una montaña que puede caer
sobre mí.  Olvido que es tu poder el que me da la vida y 
me sostiene, y que sólo tú me haces fuerte.  
Todo lo bueno viene de tu amor.

Dame la gracia de reconocer que cuanto más te abra mi corazón,
más fuerzas tendré y mas libre me sentiré.  Gozaré de tus
delicias, y cantará de gozo en tu presencia, sin más temores.

Tú eres mi salvador, confiaré en ti.  
Bendice con tu infinito poder todos mis trabajos.
  Dame luz, habilidad, sabiduría para hacer las cosas bien,
para no equivocarme en mis decisiones,
para usar bien mis capacidades.
Tómame,  Señor y capacítame con tu poder.
Dejo en tus manos todos mis trabajos, Dios mío.
No quiero debilitarme y perder el entusiasmo por el temor al fracaso.
Quiero trabajar firme y seguro, porque tú estarás conmigo para librarme.
Contigo todo estará bien, todo terminará bien,  y también
de mis errores y fracasos sacarás una bendición para mi vida.

Si te tengo a ti no me falta nada.
Pero a veces lo olvido, y mi corazón quiere ser independiente.
Me confundo creyendo que tu amor no es suficiente.
Yo quiero otros afectos, y quiero elegir a quienes amar
 y por quienes dejarme amar.  
Sana esa independencia enfermiza. Señor, 
para que pueda dejarme tomar por tu amor.
Sana todo miedo a la soledad Dios mío, 
y dame una fe profunda para creer que tú eres real.
Tú puedes saciar  y sobrepasar toda mi sed de amor.

Señor Jesús, lleno de salud y fuente de salud, 
penetra en cada uno de mis órganos con tu poder 
y fortalece todo mi cuerpo.  
Pero te ruego también que me liberes 
del temor a la enfermedad, al cansancio, al dolor, al desgaste.
No permitas que viva obsesionado por mi bienestar 
y hazme fuerte con tu poder.
Muéstrame la hermosura de participar
 de tu Pasión con mis dolores, 
ofreciéndote con amor mis modestias.
Enséñame a entregarme a mis trabajo sin temor a 
debilitarme o desgastarme.  
Y libérame del temor a la muerte.

Muchas veces el miedo al futuro no me deja vivir el presente con alegría.
Yo no puedo controlarlo todo ni tener todo previsto, 
y por eso el futuro me atemoriza.
Tengo miedo de perder lo que tengo, tengo temor de que 
me sucedan cosas malas.  Pero ese miedo es inútil.
Sin ti todo es incierto y oscuro, pero contigo todo será más fácil.
Por eso te pido la gracia de confiar en ti, para que pueda aceptar tus 
proyectos para mi vida sin aferrarme a los míos.

Dios te entrego todos mis seres queridos,
 los coloco bajo tu protección divina.
Son tuyos, Señor y yo te proclamo Rey y Salvador de sus vidas.
Tú sabes lo que es mejor para ellos, tú los conoces mejor que yo
y tienes un plan maravilloso para sus vidas.
Tómalos Señor, condúcelos con tu luz, renuévalos con tu amor y paz.
Cuídalos de todo mal y protégelos de toda perturbación.
No permitas que nada ni nadie les haga daño.
Y si algo les sucede, yo sé que tú sacarás 
de eso algún bien para sus vidas, porque eres sabio y poderoso,
y yo los he dejado en tus manos.  
Alabado seas por sus vidas, 
 porque son obra de tu amor y son tuyos.

Señor amado, tú eres mi buen pastor, mi escudo protector, 
la roca donde me refugio.  Contigo mi vida está a salvo.

Quiero vivir sin temores, caminar firme y seguro en tu presencia, 
y ser feliz en medio de cualquier peligro.  
Ningún daño arruinará mi vida, 
porque ella está en tu poderosa presencia de amor.
Todo te lo entrego, para que todo esté seguro en tu corazón divino.
Amén.



sábado, 28 de mayo de 2022

Quiero sembrar para mi hijo...

 


Yo reconozco mis errores y me doblego a los rigores de la más pura contrición;
no es una cueva de rencores mi corazón.
Sino una gota de veneno, he sido malo por ser bueno; fuera más noble mi actitud,
pero perdí el ritmo sereno de la virtud...
Me mis funestos destinos, el viejo mal de los molinos de viento ha sido el más fatal:
Ser Don Quijote en los caminos del bien y el mal.
Porque de bienes y males, divinas manos paternales de Don Quijote celestial 
llevan cuentas muy cabales a cada cual.
¡Oh Dios mío, dame el regocijo del hombre justo, el rumbo fijo, 
de quién te sigue nada más.  Quiero sembrar para mí hijo,
que viene atrás.


¨No juzguen a otros, para que Dios no los juzgues a ustedes. 
 Pues Dios los juzgarás a ustedes de la misma manera que ustedes juzgan a otros¨ 
(Mt 7, 1-2)

PAZ

 


Danos la Paz en nuestras días, Señor, porque no hay quién luche 

por nosotros, sino Tú, Dios nuestro. Amén

Sabiduría

 Jesucristo con los doctores


Concédeme Señor tu sabiduría para que me asista en mis 
trabajos y llegue a saber lo que te es grato y evitar lo que a 
ti te desagrada.
Amén

viernes, 6 de mayo de 2022

Oración para ser escuchado por Nuestro Señor Jesucristo

 



Señor Jesucristo enséñame a caminar humildemente ante Dios.  Ayúdame a  reconocer que sin la ayuda del cielo nada lograré.  Humildemente, pidiéndole a Dios toda la fortaleza que necesito y que yo no tengo, y dándole gracias por sus continuas y admirables ayudas.  Pidiéndole que venga a socorrer a tantas pobres pecadores que están como yo, expuestos a caer gravemente si no les llega una muy especial ayuda de lo alto.  Humildemente y creyendo que el Omnipotente está siempre a nuestro lado como el aire que nos rodea, como la luz que nos circunda durante el día, y a toda hora presente para ayudar a  quienes solicitan apoyo.  Señor que yo camine humildemente en tu presencia, que no me canse de pedir tu ayuda y que cumpla siempre aquel consejo de San Pablo.  ¨Hay que buscar la santidad, con temor y temblor pues fácilmente puedo caer en la tentación.
Amén.


No tengo miedo