Padre Nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre,
venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo.
Danos hoy el pan nuestro de cada día, y perdónanos nuestras ofensas,
así como nosotros perdonamos a los que nos ofenden, y no nos dejes caer
en la tentación, más libranos de todo mal.
Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.